Todos los Lunes Santo en Cusco sale en procesión el Señor de Los Temblores, llamado cariñosamente por sus devotos como el ‘Tayatcha’, patrón jurado de la Ciudad Imperial.
Su imagen recorre las principales calles del centro de la ciudad, mientras miles de personas lo siguen de cerca, rezándole a fin de obtener su protección o hasta algún milagro.
La festividad comenzó a celebrarse con la llegada de los conquistadores españoles en el siglo XVI. Con el transcurso del tiempo, las formas y tradiciones para conmemorar en el Cusco adquirieron rasgos distintivos que los hacen únicos en comparación con otras celebraciones en el país.
La advocación de este Cristo crucificado fue elaborada en el Siglo XVII por artesanos cusqueños, quienes le dieron un perfil más meztizo a la imagen.
Desde entonces es venerada en Cusco y más aún, cuando en 1720 fue sacado en procesión y la historia cuenta que calmó el terremoto que se suscitaba en ese entonces, en ese momento se le cambió el nombre de Cristo de La Buena Muerte por el del Señor de Los Temblores.
LA HISTORIA. El 31 de mayo de 1650 ocurrió en el Cusco un fuerte terremoto que atemorizó a los pobladores de la ciudad. Como un acto de fe, sacaron en procesión a la imagen del Cristo de la Buena Muerte y lograron que la tierra deje de temblar. Así lo reseña David Ugarte Vega en el libro Tesoros de la Catedral de Cusco.
A partir de este hecho, la imagen que recibió el nombre del Señor de los Temblores o Taytacha de los Temblores saldría en procesión cada 31 de marzo. Desde 1741, esta imagen, que luego sería estudiada y se sabría que fue elaborada en el Cusco, se venera los lunes santos, es decir, al inicio de la Semana Santa.
Años más tarde, en 1928, el arzobispo del Perú, Mons. Federico Pascual Farfán instauró un segundo día en el año para rendirle homenaje al Señor de los Temblores. Esta segunda fecha fue designada el último domingo de octubre, día reconocido por la Iglesia Católica como la fiesta de Cristo Rey.
Si bien la fiesta de Cristo Rey no arraigaría en la feligresía devota del Taytacha tanto como el Lunes Santo, la fe en el Señor de los Temblores creció mucho. Prueba de ello, fue cuando el Instituto Nacional de Cultura (INC) de esta ciudad restauró la venerada imagen en enero del 2005.